Opinión

Gustavo Uribe y Joel GuerreroManuel Ibarra Santos

El retorno del hidalguense Joel Guerrero Juárez a la vida política de la entidad, sólo puede explicarse a partir de la intención de preparar el andamiaje del mini/Maximato alonsista y de construir las bases para la participación electoral que permita a Miguel Alonso competir en los comicios del 2021 como candidato plurinominal a diputado federal.  El objetivo adicional está en ganar, también, la gubernatura, en alianza pragmática, con quien les garantice el triunfo, por la vía partidaria que sea. De ese tamaño. ¿Lo lograrán? ¿Les permitirá AMLO la feudalización de Zacatecas?

En esta trama política se cuenta con el apoyo del antecesor de Tello y con el aval del sucesor de Miguel Alonso. Por algo encuentra Joel Guerrero las condiciones para el retorno a Zacatecas, porque en su tierra < Hidalgo >, no tendrá, por lo menos hasta ahora, las circunstancias para su proyección personal.

La figura del “Maximato” se creó, en la visión de la historia de México, por la influencia de Plutarco Elías Calles, luego de la terminación de su periodo como presidente de la República (1924-1928) y a la etapa en que éste influyó para decidir tres sucesores continuos para mantener el control de la Nación. Ellos fueron (1) Emilio Portes Gil (1928/1930); (2) Pascual Ortiz Rubio (1930/1932); y (3) Abelardo L. Rodríguez (1932/1934).

La línea hegemónica del Maximato se rompió hasta que arribó al poder de la República Lázaro Cárdenas y este no aceptó ser un pelele de Plutarco Elías Calles. “Tata” Lázaro llegó al extremo de expulsar -extraditar, pues- del país, al jefe revolucionario que pretendió instaurar una especie de caudillismo republicano. Las rupturas y los cambios radicales, por este motivo, no se hicieron esperar.

La pregunta que debemos hacernos es obvia: ¿en el 2021 habrá las condiciones para romper con la pretensión de Joel/Alonso/Tello de instaurar la línea política del Mini/Maximato? ¿habrá un émulo de Lázaro Cárdenas en Zacatecas, guardando proporciones, que impida esta intentona? ¿La Cuarta Transformación y sus aliados, lo permitirán?

Joel Guerrero seguramente sabe que las condiciones políticas en que trabajó, en el 2010, la candidatura al gobierno de Miguel Alonso, son totalmente diferentes a las actuales, a pesar de la presunción de que dicho personaje tiene excelentes relaciones con los representantes de MORENA y la Cuarta Transformación. ¿Lo veremos? El hidalguense no contará con los mismos aliados de antaño.

Y existe una razón: en el 2012 (pero también en el 2018), Joel/Alonso/Tello, así como sus equipos, operaron en contra de Andrés Manuel López Obrador. Estos personajes se sumaron de cuerpo entero al proyecto de Peña Nieto. ¿Les perdonarán sus felonías? Aunque a Alejandro Tello le pueden salvar sus audaces decisiones, tomadas en los comicios pasados y en la actualidad, para construir puentes de comunicación hacia la 4T.

LA INFLUENCIA DE JOEL EN LOS GOBIERNOS.

En este y en el anterior gobierno del Estado, Joel Guerrero Juárez ha tenido, sin duda, una fuerte influencia en la toma de decisiones. No solamente como delegado de la Secretaría de Gobernación en la entidad, sino previamente.

Este personaje también resulta responsable, por lo tanto, de muchas de las decisiones políticas que suceden en Zacatecas, para bien o para mal.

EL TRABAJO COMO SECRETARIO DE EDUCACIÓN:

Joel Guerrero se desempeñó como Secretario de Educación pública (SEPH) de su natal entidad. Todos le reconocen al denominado “Profesor”, como le llaman en Hidalgo, su influyente trabajo en las administraciones de Miguel Alonso y Alejandro Tello

A Joel Guerrero, siendo Secretario de Educación Pública, de Hidalgo, lo único que le saltó repentinamente y le generó inquietud, fue el comportamiento inmoralmente incorrecto de su entonces director de recursos financieros, José Antonio Turrubiarte Delgadillo, quien fue vinculado a proceso por peculado y uso inadecuado de más de 100 millones de pesos del erario público. El caso trascendió en el tiempo (Fuente: El Heraldo de México, 17 de agosto, 2019).

Joel le servirá a Alejandro Tello quien, por otra parte, ofreció gobernar con zacatecanos. Ese compromiso tampoco lo ha cumplido.

RESUELTO PEÑASQUITO:

Por fin se resolvió el conflicto de Peñasquito, gracias a la intervención del gobierno de la República, a través de la Secretaría de Gobernación y a la disposición de la empresa y de los líderes de ejidatarios, trabajadores y transportistas. Sin eso, Tello, no hubiera podido mostrar el perfil de negociador en Mazapil.

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