Opinión

Senado educativasManuel Ibarra Santos

La reforma educativa de López Obrador denominada La Nueva Escuela Mexicana ha sido aprobada, finalmente, por una mayoría abrumadora en el Congreso de la Unión, proceso en el que se reivindica el papel social del magisterio, el rol formativo de las escuelas normales y coloca en el centro de las prioridades pedagógicas a niños, adolescentes y jóvenes. Evidentemente, es este un triunfo de consecuencias políticas inconmensurables para el gobierno de la República.

Cumple así el presidente Andrés Manuel López Obrador su promesa de campaña de eliminar la reforma “peñista” y de paso suma a su causa al magisterio de las diversas filiaciones ideológicas (a disidentes e institucionales), porque reconoce que la ruta de la cuarta transformación (4T) pudiera fracasar si no le acompañan los profesores, que en el país son más de 2 millones de docentes, todo un ejército imprescindible para la legitimidad y la legitimación política. En Zacatecas supera la cifra de los 40 mil, en los diferentes niveles escolares.

Los legisladores aliados del régimen han aprobado las leyes secundarias, con el voto de una mayoría contundente, que institucionaliza inexorablemente el proyecto de La Nueva Escuela Mexicana que ofrece una enseñanza humanista, inclusiva, nacional, pluricultural, equitativa, integral y democrática.

Con el aval del voto de 285 diputados federales (128 en contra) se aprobaron las reformas a la Ley General de Educación, que contempla las nuevas definiciones jurídicas, filosóficas y políticas de la propuesta educativa del régimen, que privilegia el sentido humanista y promueve la participación de padres de familia y representantes de los diversos sectores sociales, en el hecho educativo.

Se aprobaron dos nuevas Leyes en la Cámara de Diputados y de Senadores. Primero, La Ley Reglamentaria sobre Mejora Continua de la Educación que plantea la creación de un sistema integral de formación, actualización y capacitación de los maestros, que se retroalimentará con evaluaciones diagnósticas.

Y dos, se avala la Ley General del Sistema de Carrera de los Maestros y Maestras, que establece los mecanismos de admisión, promoción y reconocimiento del personal docente.

Nace con esto, un sistema de mejora continua, coordinado por un organismo público descentralizado.

Simultáneamente con esto, se aniquila de manera automática la Ley General del Servicio Profesional Docente, con su evaluación punitiva y desaparece el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

Las escuelas normales que estuvieron en la línea, en los últimos 30 años, de su virtual desaparición, ahora se ven fortalecidas y serán las instituciones responsables (recuperan su función tradicional) en la formación de los maestros de México.

TELLO Y EL MALTRATO A LOS MAESTROS.

Mientras que el presidente de la República impulsa la dignificación y reivindicación del trabajo de los profesores, en Zacatecas los docentes han vivido tiempos complicados, con el incumplimiento hacia un segmento magisterial del pago oportuno de sus salarios y el mal trato en las esferas burocráticas. Alejandro Tello argumenta la falta de liquidez y la ausencia de apoyo de la federación, pero a la circunstancia se suma el factor de la ineficiencia en la conducción del sector educativo.

La coyuntura que plantea la reforma educativa de AMLO, genera una oportunidad excepcional para que Zacatecas presente ideas y proyectos educativos de avanzada, a efecto de que no se quede como testigo de sal, si es que queremos un trato justo, digno y respetuoso de la federación.

REFORMA EN PROCESO DE CONSTRUCCIÓN.

La reforma educativa <lopezobradorista>, sin embargo, no está del todo concluida y es un proceso en construcción. Falta mucho por hacer.

Se necesita clarificar y precisar, más aún, el modelo pedagógico de La Nueva Escuela Mexicana y sustentar con mayor racionalidad académica los cambios propuestos.

Y es aquí, donde los profesores, los padres de familia, los investigadores y la sociedad en general, pueden aportar ideas para enriquecer la reforma educativa.

Pero también es el espacio donde Zacatecas podrá hacer acto de presencia. Ojalá no se desaproveche la oportunidad histórica y luego se justifique con pretextos y ocurrencias.

Hay que hacer de la educación de excelencia la herramienta transformadora de Zacatecas. Ese es el desafío supremo.

e-max.it: your social media marketing partner
Guadalupe