Zacatecas. El modelo neoliberal es una fábrica de pobres, dice el candidato del PRD-PT a diputado federal

El candidato a diputado federal del PRD-PT, Antonio Mejía Haro, dijo que al transcurrir el tercer año de gobierno de Enrique Peña Nieto, el balance es negativo, porque los fracasos en seguridad, economía, empleo, desarrollo y bienestar social, entre otros, son más que evidentes.

Y agregó: “la administración actual priísta prometió triplicar el crecimiento económico que se venía dando del 2%, el cual se calificó en ese entonces como mediocre, es decir, se comprometió a un crecimiento económico de 6% anual; sin embargo, la realidad es otra, ya que en 2013 la tasa de crecimiento fue todavía más mediocre, de sólo un 1.4%. Este decrecimiento se atribuyó a factores externos. Para 2014 la SHCP pronosticó un crecimiento de un 3.9%, pero el crecimiento de la economía mexicana sólo alcanzó el 2.1%”.

En síntesis, dijo Toño Mejía, "nuestra economía va en picada, está deprimida, voces expertas de analistas atribuyen el fracaso de la economía a la reforma fiscal tan pregonada, la cual es regresiva para la economía de los mexicanos, pues afectó el ingreso de las familias, castigó con más impuestos a las pequeñas y medianas empresas, muchos pequeños comercios cerraron y otros están por cerrar ante la obligatoriedad de la contabilidad en línea y la emisión de facturas electrónicas, lo cual técnica y económicamente es para muchos imposible por el tamaño del comercio".

Al disminuirse el consumo por falta de ingresos, se disminuye la producción y la inversión, y con ello se pierden empleos, resumió el candidato.

Bajo este contexto, subrayó, es impostergable cambiar de modelo económico, abandonar neoliberal actual, recomendado por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, el cual está agotado y ha resultado ser una verdadera fábrica de pobres en México y en otros países del mundo.

Toño Mejía Haro indicó que hay que implementar un modelo económico que incentive la planta productiva nacional, al campo y a la industria mexicana y no a las trasnacionales, un modelo económico con crecimiento y bienestar social.

Para ello, enfatizó, es necesario que lleguen a la Cámara de Diputados y al Senado de la República, legisladores más nacionalistas y no entreguistas, diputados que al votar las leyes y presupuestos, piensen en México, en el bienestar de su gente y no en intereses personales, partidistas o externos al país, como sucedió con la entrega del petróleo a empresas privadas y trasnacionales con la reforma energética, la cual resultó ser el mayor atraco a la nación de las últimas décadas, pues ya estamos viendo sus consecuencias, ahora estamos vendiendo muy barato el petróleo (39 dólares por barril) a Estados Unidos, y éste nos lo regresa en gasolinas a precios mucho más caros que en su país.